Primeramente, debemos deshacernos de todo aquello que quizás hemos guardado durante años, darle una limpieza general y empezar a visionar cómo podemos distribuir sus espacios para darle la decoración que deseamos.
Hay una particular preferencia de convertir a la azotea en un lugar ajeno a nuestro hogar, es decir en una especie de refugio que nos aleje de lo cotidiano, un lugar para descansar o para divertirnos con nuestros amigos, incluso se utiliza para realizar pequeñas reuniones o fiestas.
Por ejemplo, podemos adicionar una o más hamacas, así como construir un pequeño bar surtido con nuestras bebidas favoritas, o una mesa con sombrilla en donde podamos jugar a las cartas y en donde tal vez también podamos pasar un momento romántico con nuestra pareja.
No olvide colocar plantas, las que le darán un aire a naturaleza y a serenidad, así como tampoco deje de tener a mano sus elementos favoritos de distracción como un televisor, un equipo de sonido, un sistema de iluminación regulable, una colchoneta para tomar sol, entre otros
